Se describen las medidas generales a adoptar en caso de una intoxicación con un agroquímico. Al final se detallan a que grupos químicos pertenecen los productos más utilizados.
Contacto ocular:
Inmediatamente lavar los ojos con suero fisiológico o agua limpia en forma continuada durante por lo menos 15 minutos.
Contacto dermal:
Quitar la ropa contaminada y lavar la piel, los cabellos y las mucosas con agua y jabón o con agua bicarbonatada (diluir un sobre de bicarbonato de sodio en un litro de agua).
Inhalación:
- Trasladar a la persona afectada al aire libre y fuera del área contaminada.
- Aflojar las ropas ajustadas (cinturón, cuello) para que pueda respirar sin dificultad.Deberá mantenérselo quieto y acostado cuidando que la boca y nariz estén libres de obstáculos. El cuello debe mantenerse en forma extendida para dejar libre el tracto respiratorio.
- Si la respiración ha cesado o es dificultosa, debe brindársele una respiración artificial boca a boca, teniendo la precaución que el socorrista no sufra contaminación del accidentado (emplear tubo de Mayo).
- El paciente será arropado para prevenir enfriamientos, pero evitando el sobrecalentamiento.
Ingestión:
No se debe inducir al vómito si el paciente está:
a) en coma, inconsciente o entrando a la inconsciencia.
b) con convulsiones.
c) si ha ingerido un producto formulado en base a solventes derivados de hidrocarburos.
d) afectado por sustancias corrosivas.
e) cuando está expresamente contraindicado en la etiqueta.
- No impedir el vómito en caso que éste ocurra espontáneamente.
Si el paciente está inconsciente o si tiene convulsiones no dar nada por boca.
- Si el paciente está despierto y consciente administrar:
Jarabe de Ipeca: para provocar el vómito. Dosis 30 ml para adultos; 15 ml para niños. Inmediatamente de administrado el jarabe, suministrar agua (aumenta la acción emética): 200 a 300 ml adultos; 100 ml niños.
Si no ocurre el vómito, repetir la dosis a los 30 minutos.
Carbón activado:
Luego de una hora de ocurrido el vómito administrar carbón activado (diluir dos cucharadas soperas de carbón activado en medio vaso de agua).
Si la víctima está inconsciente u obnubilada, o si el vómito no se produce con el jarabe de ipeca, realizar intubación gástrica, aspiración y lavado del estómago usando solución salina isotónica o bicarbonato de sodio al 5%.
Mantener la cabeza de la víctima a un nivel inferior al del estómago durante la intubación y el lavado (posición de Trendelenburg, o en decúbito lateral izquierdo, con la cabeza inclinada hacia abajo); aspirar la faringe para retirar el eventual contenido estomacal regurgitado.
Debido a que muchos plaguicidas se disuelven en destilados de petróleo, la emésis y la intubación del estómago implican el serio riesgo que el solvente se aspire, produciendo neumonitis química. Por esta razón, antes de la intubación gástrica, puede ser conveniente insertar un tubo endotraqueal (preferentemente con balón inflable). Esta práctica debe realizarse bajo supervisión médica y siguiendo la técnica adecuada.
Guardar una muestra del vómito o del lavado gástrico inicial para análisis químico.
Si el paciente no defeca en 4 horas y si está plenamente consciente, dar 0,25 g/kg de sulfato de sodio en 50-200 ml de agua como purgante. El sulfato y el citrato de magnesio son igualmente convenientes en dosis similares, siempre que la función renal sea normal. El magnesio puede deprimir la función del sistema nervioso central, especialmente en las intoxicaciones por organofosforados.
Nota: Ante la necesidad de trasladar al paciente, recostarlo sobre el lado izquierdo del cuerpo con la cabeza ligeramente extendida hacia atrás para facilitar la respiración y evitar la broncoaspiración.
El médico, enfermera o socorrista que lava, retira la ropa o asiste al enfermo puede contaminarse. Por esta razón hay que usar guantes y ventilar la habitación o consultorio.